Una de las hipótesis que se manejan con impulso al cambio de día y horario, es una supuesta ¨sed de revancha¨ de una de las hinchadas de uno de los dos equipos, por algo que habría sucedido en tierras sudafricanas en el transcurso del mundial.
Por otro lado, la Policía Federal no vería con buenos ojos el actual horario del partido por coincidir con un multitudinario acto que realizará la CGT en en la Avenida 9 de Julio, en conmemoración del día del trabajador. El problema radicaría que la mayor parte de las fuerzas de seguridad estarían afectadas al acto político, imposibilitando desarrollar el operativo en La Bombonera de forma exitosa.
Y por último, y tal vez el más simple y lógico, es que por una cuestión natural histórica no se puede disputar un partido de semejante magnitud planificando su finalización a las 11 de la noche, sobretodo pensando en la desconcentración de parcialidad visitante.
Por todo esto, se especula con que el encuentro sufra un torundo cambio y pase a jugarse el sábado a las 11 de la mañana, teniendo en cuenta que el mismo día se disputan otros 2 clásicos: San Lorenzo-Huracán a las 14 y Racing-River a las 16:10.
Como otras opciones se de horarios aparecen el sábado a las 20 o el lunes también a las 8 de la noche.
La definición llegará desde la AFA en las próximas horas, y esperemos que sea pensando más en el público y no tanto en la televisión.
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